Mucho tiempo sin escribir, todo el verano, conciertos y otras vivencias por medio...demasiadas, o no.
Desde mayo ya anunciaba el concierto de 7 de julio en Getafe y la gira conjunta de Andrés Calamaro y Fito y Fitipaldis. Pues allí estuvimos y allí disfrutamos del evento. Cuatro horas seguidas de rock del bueno, sobre todo en el inicio y el final del concierto, que pudimos disfrutar a ambos, en ocasiones versionándose unos a otros o cantando juntos varias canciones. Abrió el concierto "A los ojos" de Andrés, continuaron con "No se puede vivir del amor" y con un par de Fito (se me nota demasiado que soy más de Andrelo). A continuación disfrutamos de un recital de Andrés con un repertorio que, respetando lo más conocido, se atrevió con sorpresas "honestas" o "asalmonadas" como "Las Heridas", "Lo que no existe más", "Crucificame" o "Días distintos". No faltaron las clásicas como "Flaca", "Loco", "Te quiero igual", "El Salmón", "Alta Suciedad","Estadio Azteca" o "Paloma" y alguna que otra, cuanto menos, esperable, como "Crímenes perfectos" o "Canal 69". Para despedir a Calamaro interpretaron a dúo un himno, "Estadio Azteca", tras el que comenzó Fito con los éxitos de "Por la boca vive el pez", "Lo más lejos a tu lado" y sus dos anteriores discos. No faltaron "Acabo de llegar", "Por la boca vive el pez", "la casa por el tejado", "trozos de cristal" o "a la luna se le ve el ombligo".
Como me quedé con ganas de más y al único concierto de la gira al que podía ir después además del de Getafe era el de Barcelona, no me lo pensé y junto a un amigo cogimos el coche y las entradas y nos plantamos en Barcelona para repetir espectáculo. El repertorio practicamente el mismo, con algún pequeño cambio y terminando el concierto con "Flaca" en una noche de increíble luna llena, en lugar de con "Paloma". El Parc del Forum mucho mejor que el Estadio Juan de la Cierva de Getafe, todo hay que decirlo.
En cuanto a la emoción, eso sí, gana por goleada el de Madrid, que fue en el que me rodeé de los míos, siempre a falta de alguno, y en el que conocí a gente estupenda a la que espero tener la oportunidad de congeniar.
En cuanto a la emoción, eso sí, gana por goleada el de Madrid, que fue en el que me rodeé de los míos, siempre a falta de alguno, y en el que conocí a gente estupenda a la que espero tener la oportunidad de congeniar.